Independizarse y vivir cómodamente son dos de las cuestiones que van a determinar nuestro proyecto de vida. De hecho, son las piezas angulares sobre las que va a girar nuestro día a día. Nuestro principal afán a la hora de trabajar es conseguir el dinero suficiente como para alquilar una vivienda o para comprarla. Esa siempre va a ser una de las inversiones más importantes que se pueden acometer a lo largo de la vida y no cabe la menor duda de que, alrededor de eso, se va a ir construyendo todo lo que tiene que ver con su vida.
En España, en los últimos años se han tenido muchos problemas en materia de conseguir independizarse. Son muchos los y las jóvenes que no encuentran la manera de conseguir un trabajo que sea lo suficientemente estable como para poder acometer el alquiler o la compra de una vivienda. Y es que el empleo es uno de los grandes debes de los que dispone la economía española del siglo XXI. Sin esa seguridad que proporciona un trabajo fijo, es muy complicado que tengamos la oportunidad de obtener la independencia que otorga una vivienda diferente a la de nuestros padres y madres.
Y aquí viene una de las grandes cuestiones en relación a esta materia: ¿es mejor comprar o alquilar una vivienda? La respuesta a esta pregunta depende en buena medida de la persona que la vaya a responder. Nos parece lógico que haya gente que se decante por alquilar porque no tenga un empleo que sea fijo y no tenga claro exactamente dónde se va a ubicar su futuro. Por otra parte, y si la situación laboral de una persona arroja algo más de luz, no nos extraña que se decante por la compra de la vivienda para no tener que pagar durante toda la vida por el espacio en el que vivimos.
¿Qué es lo más habitual en la España que conocemos a día de hoy, comprar o alquilar una vivienda? La verdad es que hay dos datos que reflejan bien que ambas alternativas son idóneas para según qué personas o familias. Vamos a proceder a analizarlos:
- Según una noticia del diario El País, España va a tener más de 102.000 viviendas nuevas de alquiler para el año 2025. Se trata de un dato muy significativo porque deja claro que la tendencia, dada la inestabilidad laboral de mucha gente, es la de alquilar una vivienda. Este es el tipo de viviendas que busca la gente joven en los tiempos que corren… y es una buena manera de empezar a obtener una primera imagen de lo que es vivir ya sin el paraguas de la familia.
- También hemos querido echar mano del dato de la compraventa de viviendas en el interior de nuestras fronteras. En 2022, este dato alcanzó las 650.000 casas, una cifra que no se veía desde 15 años antes, justo antes de que llegara la crisis económica empezada en 2007 y que deparó tantísimos problemas tanto en España como en otros países. Y es que esa, recordamos, fue la crisis más grande desde la de 1929, que ya sabemos lo que terminó deparando a nivel social, económico… y también militar.
Está claro que, se tengan o no los recursos necesarios para iniciar un proyecto de vida por nuestra cuenta, todos y todas estamos siempre muy pendientes de todo lo que tiene que ver con el precio de la vivienda para tener una idea de cuáles son nuestras posibilidades. De hecho, este es uno de los asuntos que siempre aparecen en las noticias y que siempre suscita comentarios de todo tipo entre la gente. En España, que además ha sido un país en el que la construcción ha tenido un impacto tan grande desde el punto de vista económico y laboral, es lógico que este tema esté en boca de todo el mundo.
No ha habido momento en la historia reciente en el que haya habido una cantidad más grande de gente que esté interesada en comprar o alquilar una vivienda o que esté inspeccionando cómo se encuentra este sector en la actualidad. Es lo que dice un estudio realizado recientemente desde Vip House BCN. Aunque es cierto que el alquiler domina sobre la compraventa de viviendas en los tiempos que corren, la verdad es que en los últimos dos años está cambiando la tendencia poco a poco. En una situación económica que ha mejorado con respecto al momento de la llegada de la pandemia, es lógico que haya una cantidad creciente de gente interesada en esa compra y que esta cantidad se esté acercando a la de todas aquellas personas que apuestan por el alquiler.
La ubicación de la vivienda sigue siendo un factor clave
Son muchos los motivos que llevan a una persona a determinar cuál quiere que sea su casa. Este espacio, en primer lugar, debe tener la amplitud que consideremos suficiente como para vivir con esa comodidad que tanto deseamos. Esta es una lección que empezó a quedar clara durante el confinamiento de hace 3 años. Además de eso, también se debe tener en consideración otro tipo de asuntos como la cercanía a la que se encuentra el transporte público, la proximidad de supermercados o la rapidez con la que podamos llegar, por ejemplo, a un hospital.
Esta ubicación, por tanto, es algo que va a determinar nuestra decisión. Incluso puede ser más determinante que el precio, aunque nunca se debe olvidar un asunto como este último. También hay otros asuntos que deberían ser tenido en consideración, por ejemplo el número de personas de las que se componga nuestra unidad familiar. Si solo somos dos y no tenemos expectativas para ampliar nuestra familia, está claro que no vamos a necesitar tanto espacio como el que necesitaríamos en caso de que tuviéramos varios hijos e hijas. Por eso, cada caso en particular es muy personal y especial.
Se trata, en todo caso, de una decisión que hay que meditar mucho. Es una de las decisiones que más van a determinar nuestro día a día. Por lo tanto, hay que ser cuidadosos y pensar muy bien lo que queremos hacer. Si se diera el caso en el que compramos una vivienda y luego no nos complace en la medida en la que queremos, las molestias que podríamos padecer son muchas porque, en primer lugar, no estaríamos todo lo cómodos y cómodas que quisiéramos y porque, al final, estamos condenados y condenadas a poner esa casa en venta y a buscar el sitio que, esta vez sí, nos termine por hacer felices.
¿Cómo es la vivienda preferida por la gente en España?
Nuestro país se ha caracterizado en las últimas décadas por disponer de un parque de viviendas amplio, pero que está principalmente dominado por las viviendas verticales, los pisos. No por ello es este el modelo de vivienda que preferimos en el interior de nuestras fronteras. Las encuestas que se han realizado en relación a la materia indican que lo que se prefiere es apostar por una vivienda que disponga de jardín y garaje, lo que nos ofrece una seguridad más grande para nuestro vehículo y un espacio en el que disfrutar de las tardes primaverales o las noches veraniegas.
Es por esto por lo que se están poniendo de moda, ya desde hace algunos años, las periferias de las ciudades e incluso las de los pueblos. Y es que es en terrenos así donde se pueden construir viviendas que sean amplias y que cumplan con los requisitos que hemos mencionado en el párrafo anterior. Eso es lo que está llamando la atención de muchas personas que, ahora sí, han encontrado un espacio perfecto para conseguir amarrar esa vida tranquila y cómoda que siempre han deseado. Es lo mínimo que merecemos en el seno de nuestro hogar: tranquilidad y comodidad.
En muchos casos, está ocurriendo que los centros de los pueblos están empezando a quedar más deshabilitados como consecuencia directa de esa especie de exilio que la gente empieza a realizar hacia las periferias. La solución para este tema es que aquellas propiedades que se hayan quedado anticuadas y, por ende, abandonadas, se reconstruyan o rehabiliten con los términos que ahora mismo son tendencia: que sean propiedades grandes y que destaquen por su comodidad. Es lo que se necesita para que haya gente interesada en vivir también en las zonas céntricas, sobre todo de los pueblos (en las ciudades, es más habitual que por ejemplo los jóvenes quieran vivir en el centro para estar más cerca de la zona de ambiente y tener todo tipo facilidades a mano para no coger el coche).
La vivienda es siempre una parte fundamental de nuestra vida, sobre todo por un tema estadístico. Y es que es el lugar en el que vamos a pasar más tiempo a lo largo del día. Por eso, conviene que en todas esas horas tengamos la sensación de que estamos en el sitio que realmente queremos estar, que estemos cómodos, seguros y que tengamos la vida feliz que siempre hemos querido. Ese debe ser uno de los objetivos principales de nuestra vida.