Tener un establecimiento acorde a las necesidades de nuestro negocio es elemental si queremos conseguir la rentabilidad que esperamos alcanzar con la actividad que vamos a llevar a cabo. La comodidad o la amplitud que nos hacen falta no son inherentes a todos los locales, por lo que en muchas ocasiones nos vemos obligados a acometer reformas. Reformas que mucha gente descarta realizar a causa de los abusivos precios con los que algunas empresas tasan sus servicios.
Los pequeños emprendedores se encuentran entonces con una disyuntiva que les quita el sueño. Deben decidir entre conservar un local que carece de muchas facilidades o gastar cantidades ingentes de dinero en remodelarlo. Muchos de ellos terminan optando por la primera opción, desconocedores de que, si se busca en los lugares correctos, es posible encontrar una empresa de reformas que amolde nuestro local a las nuevas necesidades que demande a un precio muy económico y coherente.
El caso de mi familia ilustra a la perfección el tema que estoy abordando. Hace unos diez años, mis padres abrieron un bar en el centro de nuestra ciudad. Con mucho esfuerzo y sacrificio, conseguimos otorgarle una imagen intachable al negocio y fidelizar por tanto a una cantidad importante de clientes. Todo marchaba a la perfección y sin contratiempos. Pero el deterioro del edificio en el que se encontraba el local comenzó a jugar en nuestra contra.
En otras palabras, el local comenzó a quedarse viejo y, además, pequeño. Era evidente que teníamos que hacer algo para mantener a buen recaudo todos esos logros que habíamos conseguido. Queríamos darle un nuevo toque a la barra y eliminar algunas de las paredes que componían en lugar, que no ponían en peligro la estructura del inmueble y que nos quitaban un espacio que debía ser aprovechado para meter más mesas.
Grupo Navitec, el apoyo necesario para la renovación de nuestro proyecto
Comenzamos a efectuar una búsqueda de empresas que pudiesen ofrecernos sus servicios para acometer las reformas necesarias. Es cierto que teníamos cierto miedo a afrontarlo porque nuestras experiencias anteriores no habían resultado demasiado rentables para nuestra economía. Pero todo eso cambió cuando, a través de Internet, descubrimos la página web de Grupo Navitec.
En cuanto fuimos conscientes de su existencia, reunimos los datos necesarios para ponernos en contacto con ellos. Así lo hicimos, les comentamos cuáles eran nuestras intenciones y, en apenas unos pocos días, sus profesionales estaban en nuestro local para tomar medidas, inspeccionar el terreno y comenzar a familiarizarse con el establecimiento. En unos días, el trabajo estuvo completamente terminado.
Los muchachos eliminaron esas paredes que sobraban, cambiaron la barra a nuestro gusto y gracias a ello el negocio se modernizó una auténtica barbaridad. Al mismo tiempo, ganábamos el espacio que necesitábamos (un 20% aproximadamente, lo que sin duda se traduciría en ingresos extra) y todo en un tiempo récord, que impidió que tuviéramos que echar el cierre por un periodo prolongado de tiempo.
Ya hace un tiempo desde que acometimos aquella reforma. Sin embargo, los resultados del cambio los seguimos notando en la actualidad. Ampliar el local ha sido un éxito rotundo. No solamente hemos logrado mantener a nuestra antigua clientela, sino que además hemos logrado la confianza de un nuevo público. Nuestro bar está durante buena parte del día repleto de personas que destacan la comodidad del local, su originalidad y el trato atento y personalizado que día a día nos encargábamos de proporcionar.
A corto o medio plazo, no tenemos la intención de acometer una nueva reforma debido a que el local tiene los elementos necesarios para que el negocio goce de una buena salud. Sin embargo, y como las modas son, por definición, cambiantes, no nos cerramos a la posibilidad de modernizar el bar en un futuro. Para cuando ese momento llegue, ya tenemos claro en quién confiar. De eso no nos cabe ninguna duda.