Una redecoración puede llegar a ser una mudanza. Eso sí, sin cambiarse de vivienda, ni siquiera salir un paso fuera. La pintura es una de las operaciones básicas a la hora de redecorar una casa desde su estructura básica. Pero también forma parte importante de esa operación de redecorar la restauración de muebles. En este terreno entran en juego multitud de empresas dedicadas a estas labores, como Mi Pintor, un grupo de pintores especializados en las técnicas más avanzadas de pintura y decoración, que opera en la ciudad de Barcelona y que ofrece a sus clientes alta calidad a unos precios muy asequibles y adaptables a cualquier bolsillo.
Las paredes de una casa la visten, hablan de ella y de sus dueños, y ofrecen de un solo vistazo una imagen aproximada del estilo que se sitúa como rasgo primordial en dicha vivienda. Las técnicas son varias, las superficies distintas, el material, ingente. Esa multiplicidad de posibilidades provoca que confiar en un buen equipo de pintores profesionales se convierte en una necesidad si lo que buscamos en un sello de garantía. Como página web dedicada al emprendimiento, desde aquí ponemos nuestro foco de atención en aquellas pequeñas empresas (algunas veces, unipersonales y autónomas) que ofrecen sus servicios de calidad con el espectro global del público en el punto de mira.
Como asegura Mi Pintor en su espacio web, “el objetivo de la empresa es la plena satisfacción del cliente”, al que tras varios años desarrollando su actividad conocen sus necesidades y solventan sus problemas con la redecoración de la vivienda en cuestión. O del local comercial, ya que muchos de los trabajos se pueden implementar tanto en hogares como en espacios destinados al comercio. La importancia no radica ni en la superficie ni en la actividad principal que se lleva a cabo entre sus paredes.
No obstante, una redecoración no se basa única y exclusivamente en volver a pintar la pared del espacio. Además de esta actividad, quizás la más vistosa de cara a la galería, también es fundamental aplicar soluciones que aseguren el confort y la salud de los espacios. En este sentido, cobran relevancia la colocación de sistemas de eliminación de ruidos así como el aislamiento térmico de las estancias o los sistemas que previenen del moho en los espacios en los que prolifera.
Una vez finalizado el acondicionamiento de las salas elegidas, llega la hora de la nueva decoración. Para ello, los profesionales de empresas como Mi Pintor también se disponen a la colocación de elementos decorativos, tales como moquetas, vinilos decorativos, murales fotográficos, papel pintado con todo tipo de motivos y acabados, así como instalación de suelos laminados, zócalos de madera y otros materiales, frisos, micro cementos, etc.
A día de hoy es difícil estrenar una vivienda. Los precios de las nuevas construcciones resultan prohibitivos para la mayoría de personas, parejas o matrimonios que desean cambiar de hogar. Así, la redecoración pasa a convertirse en una forma de estrenar el piso sin llegar nunca a la primera mano. En ese caso, lo mejor es rodearse de un buen equipo de profesionales, a poder ser que ofrezcan todo el espectro de actividades para reducir el presupuesto y hacer realidad un proyecto de redecoración que termine por ser una interesante manera de “estrenar” casa. Con más de dos décadas de experiencia y con los tres mil trabajos realizados a más de mil clientes, el equipo de Mi Pintor ofrece todo ello y más. La pintura y los acabados decorativos son su especialidad, para la cual ofrecen al cliente una asesoría detallada y un precio asequible que garantiza el trabajo de profesionales cualificados y asegurados. Por si fuera poco, el cliente puede solicitar su presupuesto de forma gratuita para su proyecto. El éxito está garantizado. Buena prueba de ello son los comentarios de los clientes que se pueden leer en su página web, entre los que se recomienda encarecidamente el trabajo de esta empresa y se destacan, entre todas sus prestaciones, los acabados y la calidad de los mismos. Gracias a profesionales de la decoración hoy en día nadie es privado de “estrenar” casa. Una vivienda puede ser nueva aunque se adquiera en el creciente mercado de segunda mano.