El concepto de Interim Manager o Gestor Interino se originó en los países de habla inglesa a finales de la década de 1970. Inicialmente, se utilizaba principalmente en el sector empresarial y se refería a ejecutivos de alto nivel que eran contratados temporalmente para ocupar cargos de dirección en empresas que experimentaban transiciones, como reestructuraciones, fusiones, adquisiciones o crisis empresariales. El objetivo principal era proporcionar una gestión de transición efectiva y resolver problemas específicos en un período de tiempo limitado.
A medida que las organizaciones comenzaron a darse cuenta de los beneficios de contar con ejecutivos experimentados y altamente capacitados para abordar desafíos y oportunidades temporales, la demanda de los Interim Managers comenzó a crecer. Esto llevó a una mayor profesionalización de la industria, con la formación de asociaciones y redes de Interim Managers, así como el desarrollo de mejores prácticas y estándares éticos.
En la década de 1980, el concepto de Interim Manager se expandió más allá del ámbito empresarial y se comenzó a aplicar en otros sectores, como el público y el sin ánimo de lucro. Los Interim Managers también empezaron a desempeñar roles más especializados, como la gestión de proyectos, la implementación de cambios estratégicos o la dirección de crisis.
Con el avance de la globalización y la creciente complejidad de los mercados, los Interim Managers se convirtieron en una solución flexible y rentable para las organizaciones que necesitaban liderazgo temporal en diferentes ubicaciones geográficas. Esto dio lugar a un aumento significativo de la demanda y a una mayor diversidad en las áreas de especialización de los Interim Managers.
En la última década, el papel de los Interim Managers ha evolucionado aún más. Además de ocupar cargos de dirección temporalmente, también se les ha asignado la responsabilidad de impulsar el cambio y la transformación en las organizaciones. Muchas empresas buscan Interim Managers con habilidades específicas, como la gestión del cambio, la reestructuración empresarial, la gestión de la innovación o la digitalización.
La tecnología y la conectividad global también han tenido un impacto en la industria de los Interim Managers. Las plataformas en línea y las redes profesionales han facilitado la búsqueda y contratación de Interim Managers, ampliando así el alcance y la disponibilidad de estos profesionales en todo el mundo.
En resumen, la historia y la evolución de los Interim Managers se remontan a la década de 1970. Desde entonces, han pasado de ser ejecutivos temporales en transiciones empresariales a desempeñar roles más especializados en diversos sectores y geografías. Su demanda ha crecido debido a los beneficios que ofrecen en términos de experiencia, flexibilidad y costos, y su papel se ha ampliado para abarcar la gestión del cambio y la transformación en las organizaciones.
Beneficios de contar con un Interim Manager
Los expertos de AMG Interim Managers nos explican cuáles son los beneficios de contratar un Interim Manager para una empresa familiar o Pyme:
- Experiencia y conocimientos especializados: Los Interim Managers suelen ser profesionales altamente experimentados y especializados en áreas específicas, como gestión empresarial, finanzas, marketing, operaciones o recursos humanos. Su experiencia les permite abordar rápidamente los desafíos y oportunidades específicos de la empresa y aplicar mejores prácticas en función de su experiencia previa en diferentes organizaciones. Su conocimiento especializado puede marcar la diferencia en el éxito de proyectos clave o en momentos críticos para la empresa.
- Flexibilidad y adaptabilidad: Los Interim Managers están disponibles para trabajar en proyectos o situaciones temporales y se adaptan rápidamente a las necesidades específicas de la empresa. Esto es especialmente valioso en las PYME, donde pueden surgir cambios imprevistos o situaciones urgentes que requieren una respuesta rápida. Además, los Interim Managers pueden trabajar a tiempo parcial o completo, según las necesidades de la empresa, lo que brinda flexibilidad en términos de costos y recursos.
- Enfoque objetivo y sin conflictos de intereses: Al ser profesionales externos, los Interim Managers no están influenciados por políticas internas o relaciones personales en la empresa. Esto les permite tomar decisiones objetivas y basadas en la evidencia, sin conflictos de intereses. Su enfoque imparcial puede ayudar a abordar problemas difíciles o tomar decisiones impopulares que podrían ser necesarias para el crecimiento y la mejora de la empresa.
- Transferencia de conocimiento: Los Interim Managers no solo resuelven problemas y brindan resultados tangibles durante su mandato, sino que también pueden transferir conocimientos y habilidades a los miembros del equipo de la empresa. Esto puede fortalecer las capacidades internas y permitir un crecimiento sostenible a largo plazo. Los Interim Managers pueden capacitar a los empleados existentes, compartir mejores prácticas y ayudar a establecer procesos eficientes, dejando un legado duradero en la organización.
- Ahorro de costos: Contratar a un Interim Manager puede resultar más rentable en comparación con la contratación de un ejecutivo a tiempo completo. Los Interim Managers se contratan por un período específico y, por lo general, se les paga por sus servicios de manera acorde. Esto evita los costos asociados con los beneficios a largo plazo y la compensación ejecutiva de alto nivel. Además, los Interim Managers pueden aportar resultados rápidos y efectivos, lo que puede tener un impacto positivo en los ingresos y la rentabilidad de la empresa.