Quizás sea el título de artículo más redundante que te puedas echar a la cara. Pero es que no hay nada más que decir. Esto es así de fácil. Cuando se pone en marcha una empresa, lo más complicado es el arrancar. Una maraña de papeleos, de trabas burocráticas, de impedimentos y de zancadillas que te hacen desesperar. Por ejemplo, si tu objetivo es poner una tienda de venta de zapatillas, lo ideal sería que tu único problema sería el cómo vender más.
Pero en España esto no es así. Primero, se tarda mucho en poder constituir una empresa, cuando es cierto que existe una normativa europea que dice que debería ser en menos de tres días Y, segundo, es costoso. Por eso, lo que queremos indicar hoy es lo que tienes que hacer como empresa cuando te pones en manos de una asesoría. Sabemos que supone un gasto, pero en este caso, es una inversión total. No te puedes hacer a la idea de lo que supone despreocuparte y ponerte a trabajar en lo tuyo. Olvidarte de papeleos, de idas y venidas, de licencias, de tributos…todo esto lo dejas en manos de una asesoría, y listo.
Constitución de empresa
Como te decía, en España nos enfrentamos a una tela de araña de asuntos burocráticos, cuando lo único que queremos es comenzar a trabajar. Por este motivo, una asesoría puede hacer de Punto de Atención al Emprendedor (PAE) para que se encarguen de facilitar la creación de nuevas empresas, el inicio efectivo de su actividad y su desarrollo, a través de la prestación de servicios de información, tramitación de documentación y asesoramiento para el futuro emprendedor.
En tan sólo 48/72 horas desde la firma en notaría puedes tener tu empresa operativa . Si lo que quieres es ser autónomo, el plazo de tramitación se reduce a 24 horas desde la presentación del DUE. Algo que te quitas de encima.
Gestión fiscal
En lo primero que te pueden ayudar es que las cuentas salgan. Como nos indican desde Luygo, una asesoría en Rivas Vaciamadrid, tanto de personas físicas como jurídicas y ellos se encargan de que cumplas con todas tus obligaciones tributarias. Entre otras cosas, y es una máxima que no puedes olvidar, porque el no conocer una ley no te exime de su cumplimiento. Un equipo de expertos asesores resolverá todas tus dudas y buscará solución a los problemas que surjan ofreciendo pautas y consejos para que tu empresa pueda adaptarse mejor a la normativa vigente. Y ya te digo que no es fácil de conocer.
Ellos se encargan de maximizar beneficios y de minimizar el impacto tributario reduciendo la carga impositiva. Entre los temas que te pueden resolver, se encuentra el asesoramiento tributario especializado, la planificación fiscal de empresas, la presentación y liquidación de impuestos, la gestión de recursos, requerimientos y reclamaciones, y por supuesto, ellos realizarán la asistencia a inspecciones de la Agencia Tributaria. Que no es plato de buen gusto para nadie.
Asesoría laboral
Una empresa es hacer papeles y contratar empleados. Y esto no siempre es fácil. Por eso, si te pones en manos de una asesoría ellos se encargan de todo. El equipo de asesores laborales analizará cada situación ofreciéndote la información necesaria en materia de contratos, bonificaciones, nóminas, costes y finiquitos que necesites. De esta manera, te ayudará a optimizar los recursos de personal y a establecer las estrategias laborales y legales que mejor se adapten a cada situación para evitar así, posibles conflictos con los trabajadores y sobrecostes innecesarios.
Asesoramiento en materia de recursos humanos; contratos, nóminas y seguros sociales; gestión de despidos, finiquitos y sanciones, todos estos asuntos son aspectos que te pueden mejorar con una asesoría en tus espaldas.
Declaración de la Renta
Y llega uno de los peores momentos, el de hacer la declaración de la Renta. Pues bien, dejará de ser un quebradero de cabeza si lo pones en manos de una asesoría. El borrador es una propuesta de Declaración que confecciona la propia Agencia Tributaria con los datos que posee del contribuyente que lo ha solicitado. Sin embargo, es obligación del ciudadano revisar que tanto los datos como los resultados del borrador sean correctos antes de confirmarlo. Por eso, una asesoría, siempre al tanto de todas las novedades y deducciones, valorará cada caso y buscará la opción más beneficiosa para cada empresa.
Ahora seguro que ya entiendes un poco mejor, por qué tienes que dejarte asesorar por una asesoría. Aunque en este caso suena a redundante.